Naruto, el mandato del 6º Hokage. Capítulo 12: ¡Vuelven!

Capítulo 12:

¡Vuelven!

La luz entraba sobre los muros de Konoha, estaba amaneciendo. Todos los estudiantes estaban situados enfrente de la casa del Hokage. Nadie había fallado en las misiones que les pusieron, aunque estas fueran de un nivel muy superior para la mayoría. Los maestros estaban todos en fila enfrente de estos encima de un tablón de madera donde aparecería el Hokage. Allí, también habían muchos más miembros del ANBU, como Raúl.

El Hokage apareció y se dirigió a hablarles a todos. Teóricamente después de las misiones no tenían que reunirse, pero una carta entregada por un perro ninja invocado por el Hokage llegó a cada casa de los estudiantes, diciendo que era obligatoria la asistencia y que debían ir preparados para combate.

Allí también se encontraba el Kazekage junto a dos escoltas.

-Se que nadie esperaba esto, pero ha surgido una emergencia y tenemos que contestarla ahora mismo. Hace poco, unos agentes del ANBU de Sunagakure descubrieron... Como decirlo... Buf...-el Hokabe dudaba, no tenía ni idea de como comunicar aquello...- Vale, lo diré de una... Hemos rastreado a... A un biju...

Todos allí se preocuparon, las caras de terror se extendían entre todos los presentes, incluidos algunos ANBU.

-Se que tendréis muchas dudas, por eso os las contestaré todas las que pueda... Después pasaré a la instrucción.-dijo Kakashi-.

-Hokage... ¿Eso significa que nosotros solos hemos de capturar al biju?.-preguntó Toni-

-¡No! ¡Ni mucho menos! Iréis acompañados de muchos soldados hasta de nivel ANBU tanto de Konoha como de Sunagakure. No dejaría ir a tantos inexpertos contra un biju.

-Hokage. ¿Cómo sabemos que es un biju? ¿No se supone que estaban en otra dimensión?-preguntó Miry-

-Teóricamente si... Pero se ve que un nuevo usuario del rinnegan ha sido capaz de traerlo otra vez aquí... Por lo tanto no podréis bajar la guardia, porque sabemos que el biju está poseído y no reaccionará ante acciones pacifistas. Además de que su controlador no podrá estar muy lejos...

-¿Y quién será el recipiente para..?-preguntó Pablo-

-¡No! ¡Nada de eso! Una vez apresemos al biju, lo devolveremos a su dimensión. Para eso contaremos con la ayuda de Sasuke Uchiha y Naruto Uzumaki.

-Vale... Y otra pregunta. ¿Se sabe que biju es?-preguntó Pablo de nuevo-

-No lo sabemos con exactitud, pero suponemos que será Shukaku, el un cola, por eso el Kazekage nos apoyará contra él ya que fue su jinchuriki.

Nadie hizo más preguntas. A continuación el Hokage explicó en que consistía la estrategia. Los del clan Nara intentarían inmovilizar a la bestia mientras el resto tendrían que distraer a la bestia para que no se mueva de lugar mientras Sasuke y Naruto preparan la teletransportación y liberación de la bestia. 

Una vez finalizó todo, los alumnos se agruparon como quisieron para ir hasta la zona donde se encontraría el biju. Sabían que estaba en la frontera entre el país del viento y el país del fuego, por lo que sería un viaje de una noche pero muy intenso. Antes de salir todo el grupo de amigos se reunió para hablar. Raúl no estaba, pero apareció a mitad de la conversación. Arnau, que ya se encontraba algo recuperado, aunque no podía ir teóricamente, asistió.

-Chicos, quiero que tengáis mucho cuidado, por favor...-dijo Miry-

-Lo tendremos. ¡No te preocupes! -le contestó Ari-.

-Ah, una cosa antes de salir, tomad esto.-Edgar extendió la mano, donde tenía unas pequeñas bolas de madera- Si os sentís dañados, romperlas y mi mokuton os curará lo máximo que pueda, pero son de un solo uso...

-Uy pues espera que yo os de algo también. Tomad, las hice con mi elemento cristal. Si metéis una gotita de sangre dentro de este cristal se vinculará a vuestro chakra.-Ari les entregó un pequeño cristal hexagonal hueco donde al interior había una flecha de metal roja que flotaba dentro de esta. También tenia una pequeña ranura en un lateral donde iría la sangre-. Así cuando alguien esté en peligro nos lo indicará al resto y podremos acudir en su ayuda.-dijo Ari-

Todos agradecieron estos actos. Posteriormente, se dio la orden de salir de Konoha.

Todos corrían por el bosque. Avanzaron mucho en un solo día y llegada la noche se montaron tiendas de campaña en medio del bosque. Todos se reunieron junto a una fogata que había hecho Raúl donde le rodeaban un par de tiendas montadas por ellos donde dormían en conjunto menos Raúl y Edgar. Raúl porque tenía que dormir en una tienda con los del ANBU y Edgar porque roncaba y no dejaba dormir al resto, por lo que el se hacia una pequeña casa de madera para dormir. 

-Chicos... Tengo miedo...-dijo Miry-.
-¿Miedo de que?-le preguntó Ali-.
-De Toni seguramente.-le contestó Edgar-.
-Joe siempre recibo por tos laos.-respondió Toni-.
-Ey callar, que no va en broma... No es una tonteria contra lo que vamos a luchar... Es un biju...-dijo Miry con cada vez mayor preocupación-.
-Ya, pero con mis músculos seguro que lo machaco.-dijo Pablo vacilón-.
-Si porque si dependemos de tu cerebro...-le contestó Arnau-.
-¡Que te calles Judas!-le gritó Eli-.
-Hostia si habla.-le dijo Edgar a Eli-.
Toni empezó a hacerle cosquillas a Eli en el cuello. Este cayó al suelo.
-Chicos porteuse bé.-les dijo Moi señalándolos con el dedo índice-.
Mientras discutían Miry seguía preocupada, pero no era la única, puesto que los rostros de Ari, Ali, Ester y Víctor decían lo mismo que el suyo.

Todos fueron a dormir no muy tarde, ya que de madrugada tenían que salir hacía el objetivo.
Cuando se hizo de día recogieron todo rápidamente y se dirigieron hacía la ubicación de Shukaku. Llegaron a lo alto de una montaña, desde donde, no muy lejos, se vislumbró a la enorme bestia.

-Es... Es enorme...-dijo Miry preocupada-.

-Como mi po...

-¡Este no es momento Moi!-le gritó Ari-.

-Jo...-dijo Moi decaído- Nunca es momento...